El hipo es algo frecuente y normalmente inofensivo. Suele desaparecer por sí solo, pero en algunos casos puede ser síntoma de una enfermedad subyacente más grave. Este artículo trata sobre el hipo, sus causas, tratamientos y cuándo acudir al médico.
¿Qué es el hipo?
El hipo, o «tos de hipo», es un espasmo involuntario del diafragma, un músculo situado en el pecho que ayuda a respirar. El espasmo provoca una inhalación profunda y repentina, que da lugar a un sonido «hic».
Los desencadenantes más frecuentes del hipo que dura menos de 48 horas son: tomar bebidas carbonatadas, beber demasiado alcohol, comer demasiado y la agitación emocional o el estrés. En la mayoría de los casos, el hipo se resuelve por sí solo sin tratamiento médico. Si el hipo está causado por una enfermedad subyacente, tratarla puede eliminarlo.
Tratamientos y remedios
Si los ataques regulares de hipo duran más de dos días, habla con un médico. El hipo puede ser un signo de una enfermedad subyacente, como reflujo gastroesofágico, un derrame cerebral, una infección de oído o un traumatismo craneal.
Para los casos de hipo que duran más de dos días, pueden considerarse los siguientes tratamientos:
Medicación: Existen varios medicamentos para el hipo, como relajantes musculares, sedantes, antiespasmódicos, anestésicos y antidepresivos.
Estimulación repetitiva: Consiste en irritar repetidamente la zona afectada mediante diversos métodos, como contener la respiración, beber agua rápidamente o estimular la parte posterior de la garganta con un bastoncillo.
Remedios alternativos: Existen muchos remedios alternativos que pueden utilizarse para tratar el hipo, como la acupresión y la acupuntura.
Cuándo acudir al médico
Si una persona tiene hipo con alguno de los signos siguientes, debe buscar atención médica inmediata:
Síntomas neurológicos: Entre ellos se incluyen el dolor de cabeza, la debilidad, el entumecimiento y la pérdida de equilibrio.
Hipo persistente o intratable: Si el hipo es persistente o intratable, debe consultarse al médico lo antes posible.
Hipo en bebés: El hipo extraño en bebés, que es raro y repentino, debe consultarse al médico lo antes posible.
Hipo con otros síntomas: Si el hipo va acompañado de otros síntomas, como dificultad para respirar, dificultad para comer o pérdida de peso, es importante buscar atención médica.
Conclusión
El hipo suele ser inofensivo y suele desaparecer por sí solo. Sin embargo, el hipo persistente o intratable y el hipo con otros síntomas deben ser examinados por un médico. Existen varios tratamientos y remedios que pueden ayudar con el hipo, como los medicamentos, la estimulación repetitiva y los remedios alternativos.