La glucosa es una parte importante de una vida y un estilo de vida sanos. Es esencial para mantener un cuerpo estable y sano, y ayuda al organismo a procesar y almacenar alimentos y otros nutrientes esenciales. Para los diabéticos, mantener los niveles de glucosa dentro de los límites normales es una parte esencial del mantenimiento de su salud. Pero incluso quienes no padecen diabetes pueden beneficiarse de comprender cómo funciona la glucosa y cómo afecta al organismo. En este artículo veremos las funciones de la glucosa, los niveles normales de glucosa y cómo mantenerlos estables.
¿Qué es la glucosa?
La glucosa es un tipo de azúcar que el organismo descompone a partir de los alimentos que comemos. Es una de las principales formas de energía que el cuerpo utiliza para alimentar sus actividades. Cuando la glucosa entra en el torrente sanguíneo, empieza inmediatamente a ser absorbida por las células del organismo, donde puede utilizarse para producir energía o almacenarse para un uso posterior. Los niveles de glucosa en la sangre son controlados por el páncreas, órgano que produce la hormona insulina. Esta hormona ayuda a trasladar la glucosa del torrente sanguíneo a las células.
Las funciones de la glucosa
La glucosa tiene varias funciones importantes en el organismo, como proporcionar energía y mantener el equilibrio químico normal. Es la principal fuente de combustible para todas las células, incluidos el cerebro y los músculos, y es esencial para el funcionamiento normal de los órganos. La glucosa también es necesaria para un crecimiento y desarrollo adecuados, y puede ayudar al organismo a curarse y reparar los tejidos dañados.
Niveles normales de glucosa
La Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos afirma que los niveles normales de glucosa oscilan entre 70 y 110 mg/dL antes de las comidas, y deben mantenerse por debajo de 180 mg/dL hasta dos horas después de una comida. Sin embargo, se considera que el intervalo óptimo para las personas sanas no diabéticas está entre 80 y 110 mg/dL para el nivel de glucosa en sangre en ayunas. Si los niveles de glucosa en sangre de una persona son demasiado altos o demasiado bajos, pueden causar graves problemas de salud.
Cómo mantener unos niveles de glucosa estables
Mantener unos niveles de glucosa estables es una parte importante para que el organismo funcione de forma eficaz y saludable. Las personas con diabetes deben prestar especial atención a sus niveles de glucosa, ya que cualquier fluctuación puede afectar a su salud. En general, se pueden mantener unos niveles de glucosa saludables siguiendo una dieta sana, haciendo ejercicio con regularidad y descansando lo suficiente.
Una dieta equilibrada que incorpore proteínas magras, verduras, fruta y cereales integrales puede ayudar a mantener unos niveles de glucosa saludables. Los diabéticos también deben vigilar su ingesta de hidratos de carbono y asegurarse de repartir las comidas diarias a lo largo del día.
La actividad física regular también puede ayudar a mantener los niveles de glucosa dentro de los límites normales. El ejercicio aumenta la sensibilidad del organismo a la insulina y le ayuda a transportar la glucosa a las células con mayor rapidez. Las personas con diabetes deben hacer ejercicio con regularidad para mantener unos niveles óptimos de glucosa y mejorar su salud y bienestar generales.
Por último, es importante descansar mucho para que el cuerpo pueda recuperarse de la actividad extenuante y repararse. Los estudios han demostrado que la falta de sueño puede elevar los niveles de glucosa en sangre, por lo que es importante dormir al menos 7 horas por noche.
Monitorización Continua de la Glucosa (MCG)
Para los diabéticos existen dispositivos de monitorización continua de la glucosa (MCG) que les ayudan a controlar sus niveles de glucosa. Estos dispositivos son pequeños y portátiles y miden los niveles de glucosa a lo largo del día. Pueden ser bastante caros, y las compañías de seguros sólo suelen cubrirlos para los diabéticos de tipo 1, pero son muy precisos para medir los niveles de glucosa en sangre.
Conclusión
Mantener unos niveles normales de glucosa es una parte importante para que el cuerpo esté sano y funcione correctamente. Las personas con diabetes deben prestar especial atención a sus niveles de glucosa, ya que cualquier fluctuación puede tener graves consecuencias para su salud. Seguir una dieta y un estilo de vida saludables, incluida la actividad física regular y descansar mucho, puede ayudar a mantener los niveles de glucosa dentro de los límites normales. Los diabéticos disponen de dispositivos de control continuo de la glucosa que les ayudan a controlar sus niveles de glucosa con mayor precisión. Si conoces la glucosa y sus funciones y sabes cómo mantener los niveles estables, podrás dar un paso importante en el control de tu salud.